La ciencia ciudadana implica la participación de personas no especializadas en actividades de investigación científica. La ciudadanía colabora con personas expertas para crear conocimiento. En el ámbito educativo, la ciencia ciudadana es una modalidad de prácticas de aprendizaje-servicio.

Se parte de problemáticas y situaciones que invitan a profesorado y alumnado a investigar para poder responder a un interrogante socialmente relevante o dar respuesta a una necesidad detectada.
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