Existen evidencias sólidas de que las interacciones sociales están en la base del desarrollo humano. Pero no todas las interacciones y diálogos fomentan ese óptimo proceso educativo desde la primera infancia. Este artículo presenta algunas de las interacciones que sustentan una educación infantil de alta calidad que conducirá a un impacto sustancial positivo a lo largo de la vida en el éxito educativo, social y económico posterior.
Las interacciones de calidad van más allá de las mejoras cognitivas y favorecen el desarrollo emocional y el bienestar y están determinadas por la capacidad para resolver problemas bajo la guía de un adulto o en colaboración con los iguales más capaces.
Puedes hacer click aquí para leer, al completo, el artículo publicado por Aula de Infantil en su número 89.
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